¿Vives despierta?

Mafalda

¿Vives despierta? 

Lúcida es quizás uno de mis adjetivos favoritos, uno de los que más me gustaría que me caracterizara a lo largo de toda mi vida.

Seguro que has tenido momentos de máxima lucidez.

Ayer tuve un momento revelador. Las revelaciones ocurren cuando estás lúcida, esto es, cuando estás viviendo plenamente consciente.

Mi momento ocurrió mientras caminaba (suele pasar, los paseos son plenamente inspiradores). Uno de esos momentos en los que atas cabos, en los que dices: estoy aquí por C, B hizo C, A provocó B, y C impulsará D. De repente tuve un momento en que lo entendí todo.

Es posible que creas que me estoy poniendo muy metafísica y que sea algo propio de mí que no todo el mundo comparte. Pero te aseguro que la vida consciente es una finalidad vital en todos los seres humanos y desde tiempos remotos lo sabían bien. 

Esos momentos son fugaces, y aunque quieras guardarlos se esfuman, vuelves a tu vida corriente y te olvidas, desconectas de estas realidades conscientes. Es un duro trabajo vivir así la mayoría de tu tiempo, pero a mí me gustaría conseguirlo.

La conciencia es el campo que permite lo posible, si no abres la puerta a las revelaciones no puedes tomar conciencia de las cosas. A eso lo llamo despertar. Me gustaría que pensaras en tus momentos más lúcidos. Momentos en los que tomas conciencia de ti misma. Suena simple, ¿verdad? El tomarse conciencia de una misma es sin embargo complejo, a pesar de que nos parezca tan evidente.

Es complejo porque la mayoría de nuestro tiempo vivimos dormidas. No es culpa nuestra. No interesa que tomemos conciencia de nuestro alrededor, precisamente porque sólo así nos damos cuenta de que la mayoría de cosas se escapan a nuestro entender, y la conciencia nos da el poder para comprenderlas. Sin embargo, la comprensión no puede tener lugar en un mundo artificial creado para que sigamos girando la rueda del consumo.

En mi caso, elegir mi formación en filosofía ha sido el camino para atender a esa necesidad que he tenido siempre de estar más despierta. Aunque me reconozco más libre, no me siento especial ni afortunada, porque si no ha sido tu caso pero sientes ese impulso, siempre es el momento oportuno para empezar, vengas de donde vengas.

Mi propósito de año nuevo es despertarme todavía más, así que te invito a despertar de la oscuridad y salir de la caverna, como haría Platón, para que te ciegues de realidad verdadera. 

Philosophy & Flow 🙂